sábado, 25 de enero de 2014

Capítulo 34

Yo:¿me estas diciendo que la madre de Hazza, entró a su casa para echarte de ella?
Carmen: Aja.
Yo:¿Harry lo sabe?
Carmen: No, ni pienso contarselo. Ya tenemos suficientes problemas cómo para meter más mierda. Ya no se que hacer para que todo vuelva a ser como antes.
Yo: Nialler y yo nos vamos a Miami quince días para relagarnos y tal... a lo mejor prodriais ir a un spa o algo.
Carmen: No sé...
Harry: Carmen... ah, estas hablando por telefono.
Carmen: Si, dime,¿Que quieres?
Harry: Da igual, luego hablamos.
Carmen: Me ha pillado llorando, joder.
Alba: Habla con él. Cuentale todo y arreglarlo. Llegar a un acuerdo, no sé. Recordar viejos tiempos, esas cosas.
Carmen: Te tengo que dejar, pasalo bien ¿Vale? Y no te preocupes por mí, gracias por escucharme.
Yo: De nada. Para eso estan las amigas.
*Fin de la conversación telefónica*
-¿Me haces la cena?-James me despierta de mis pensamientos. Lo levanto y siento en mis piernas.
-Cómo hoy es tu última noche aquí, ¿que tal si vamos a Nando's?-acepta y va a la habitación de invitados donde tiene su ropa.
-¡He oido Nando's!-Nialler aparece corriendo.
-Vamos a cenar allí.
-Genial.- me masajeo el cuello mientras muevo la cabeza en circulos.-¿Te duele el cuello?-pregunta preocupado.
-Si, pero es normal en mí. Siempre me duele.
-ven aquí.-se pone detrás mía y con sus grandes manos masajea la zona dolorida. Gimoteo de dolor pero a la vez alivio. Después de un tiempo noto sus calidos labios contra mi piel. Besa mi hombro y luego el cuello. Río nerviosa y me doy la vuelta para besarle los labios. Toqueteo su abdomen a la vez que el mis pechos.
-¡Ya estoy!-Anuncia James.
-Vale, vete bajando, vamos ahora.-contesto sin hacerle mucho caso. La tensión sexual se olia a kilómetros
-Vale, Niall ¿Porqué tienes un bulto en el pantalón?-Omg, la erección de Niall era notable y no pude aguantar las carcajadas sonoras. Cai al suelo de la risa y me puse roja como un tomate por no suministrar bien el aire. Mi hermano no entendía pero Nialler estaba como yo, con un ataque de risa tremendo.
-Os espero en el coche.-mi hermano bajo las escaleras desapareciendo de nuestras miradas.
-A sido buenísimo. Pensé morir.-comento mientras me visto rápido:
-Todo esto es por tu culpa.-El también se cambia.
-¿Por mi culpa? Yo no soy la que da masajes jajajaja.
-Si no te doliera el cuello no pasaría nada de esto.-se mofa.
-jajajaja déjalo Niall. Vamos.
Cenamos y me encontré a muchas fans. Claramente no me negué a ninguna foto o autógrafo.
Entre tanto, me veía haciendo las maletas mientras Niall veía Glee en la televisión. aun estaba en boxers y no tenia nada preparado.
-¿Quieres levantarte? Venga.-como no me hacia caso cogí un puñado de palomitas y se las tiré descaradamente, reprimí una carcajada y seguí con mis cosas.
-Pídeme perdón.-Mi presentimiento era malo.
-Nunca, eso te pasa por no hacerme caso.
-¿Así señorita Horan?-Se sentó en el borde de la cama y con sus manos cálidas me acerco a él hasta quedar entre sus piernas.
-Quien te dijo que fuera "Señorita Horan". Creo que te equivocas Gallagher.
-¿Desde cuando me llamas por mi segundo apellido?
-Desde hoy jiji.
-Aaaah, mierda, ya me has desviado del tema. ¿Como lo haces?
-Cuestión de practica.-río por las cosquillas que me produce.
-Venga, que tenemos un vuelo que coger.
*****

-awww... que pasada. ¿Como dijiste que se llamaba?-Estaba alucinada por la maravilla que tenia delante de mis ojos.
-Fontainebleau, ¿Bonito eeeh?-Abraza mi cintura desde atras y apoya su mentón en la hendidura de mi cuello.
-Precioso.
-Tu si que eres preciosa.-Me susurra en el oido.
-Nialler, eres un amor pero como me sigas tratando tan bien me malcriaras.-Me suelto de su agarre y beso la punta de su nariz.
-¿Porque no te das una vuelta mientras yo instalo todo.
-Esta bien.-Le robo un corto beso. Este sitio es enorme. Lo siguiente, gigante. Estoy segura de que si me alejo mucho de recepcion me perderé y tredré que preguntar el camino a algún extranjero con acento raro o a una modela anorexica. Si, veo muchas películas. Después de dar una vuelta por allí y escuchar algunos gritos de chicas, que supongo que eran fans de Niall o mías, subí a ayudarle. -¡Alba! Me puedes firmar un autografo, soy de España y eres mi idola.-una chica de mediana estatura con una extraña aparencia a mí entra en el acensor justo a tiempo. -Pues claro, es genial poder hablar en español con alguien. -¿Y Carmen Lewis? -Lo intentamos pero siempre acabamos hablando en inglés. Toma.-le doy su cuaderno. -¿Sabes? Siempre he soñado con este momento, pero es mejor en la realidad.-la chica estaba llorando y temía que se desmayase. Me recordaba tanto a mí ... -¿Eres directioner? -Si, amo a One Direction pero tu siempre serás mi favorita. -¿Te gustaría conocer a Niall Horan? -¿QUE SI ME GUSTARÍA?-La ojiverde se palideció y empezo a tembrar. -Respira hondo, tranquila.-la ayudo a salir del acensor y la acerco a la habitación donde se encontraba Nialler. -Lo siento, es que esto es un sueño para mí.-Río y abro la puerta. -Niall, te traigo a alguien que quiere conocerte.- Ella entró timida y se acercó a donde mi novio estaba. -Hola, Como estas? -Creo que me va a explotar el corazón.-Ambos reímos y después de hacernos fotos con ella se fue, le pedimos discreción ya que queriamos estar tranquilos, ella lo entendió perfectamente. -Que maja.-comento. -Si, una monada.-continúa guardando ropa en los armarios. -Estoy cansadisima, creo que dormiré un poco.-me deslizo debajo de las sabanas en sujetador y bragas. -Que tentador.-dice Niall sin mirarme. -Ya ves. ¿Porque no descansas conmigo? -Creeme, si me meto contigo ahí no podré descansar, estoy demasiado salido jajajajajaja.-río porque en cierta manera era verdad. Llevábamos una temporada muy... "activos" en cierta forma. -Haz lo que quieras, pero que sepas que tengo frío sin nadie que me abrace. -Estamos a 38° grados. -Tienes razón, no me di cuenta.-me deshago de mi ropa interior y se la tiro como el que no quiere la cosa.-Así mejor. **** -Creo que deberíamos bajar el ritmo.-digo sudando después de caer rendida con la respiración agitada. -No veo nada de malo en esto.-Coloca sus manos debajo de la nuca. -Tienes razón jajajajaja.-reímos como dos locos y nos quedamos el resto del día en cama, riendonos de las cosas que decía el otro y abrazados hasta quedar dormidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario